
El verano acaba de comenzar y ya nos ha tocado sufrir la primera ola de calor. Según los augurios de la meteorología, la cosa no pinta bien para el resto de la estación. Y es que todo indica que este verano va a ser bastante caluroso, y en consecuencia, habrá que tomar precauciones para que los grados de más del mercurio no nos afecten de manera negativa. Esas precauciones, por supuesto, se extienden también al volante. Así que, visto lo visto, desde AMS Conde te ofrecemos 10 consejos para saber cómo conducir con calor. ¡Toma nota!
Controla la temperatura del motor
El sobrecalentamiento es uno de los mayores riesgos ante una ola de calor. Para prevenirlo, es útil controlar la temperatura del motor: cuando esta se aproxima a zona de alerta roja, conviene no parar el coche de golpe. Sí que es útil, sin embargo, apagar el aire acondicionado y abrir las ventanillas. Esto facilitará que el motor pueda comenzar a enfriarse, al tener menos cargas que soportar.
Revisa el sistema de refrigeración
El nivel bajo de refrigerante y el envejecimiento del líquido pueden provocar una mala refrigeración del vehículo. Igualmente, para un mayor confort del conductor es fundamental revisar el buen funcionamiento del aire acondicionado. Esto también es recomendable por seguridad: el calor produce somnolencia y esta eleva un 40% el riesgo de sufrir un accidente. No dejes el coche en marcha al ralentí con el aire acondicionado o el climatizador en uso mientras espere o descanse ya que se puede descargar la batería.
Verifica el nivel de aceite
El nivel del aceite muy bajo es perjudicial ante elevadas temperaturas y hace que pierda eficacia el sistema, lo que puede generar complicaciones añadidas.
Baja las ventanillas al acceder al vehículo
Para igualar la temperatura interior y exterior antes de poner el sistema de climatización es necesario bajar las ventanillas. Esta práctica evita sobrecargas de uso y alarga la vida de los elementos de climatización.
Comprueba el estado y el nivel del líquido de frenos
Con mucha temperatura, los frenos pierden eficacia con lo que es vital revisar sus condiciones si se va a usar el vehículo durante los los meses con calor.
Evita circular en horas de máximo calor
Además de al motor, las altas temperaturas podrían provocar un sobrecalentamiento de los neumáticos. Igualmente, verificar su estado y presión y ponerlos a punto es útil para evitar incidentes. Con altas temperaturas, son más propensos a sufrir pinchazos y reventones.
Mantente hidratado
Bebe constantemente y de forma abundante agua y otros líquidos, como zumos de frutas. La deshidratación al volante es casi tan peligrosa como conducir borracho; eso sí, evita el alcohol y las bebidas con cafeína y alto nivel de azúcar. Lleva suficiente agua si viaja con niños o personas mayores y recuerda que nunca dejes a personas mayores, menores ni animales en el interior, aunque sea con las ventanillas abiertas.
Protege el interior del vehículo con un parasol
La incidencia directa del sol sobre el interior puede provocar daños y deformidades. Por este motivo es necesario proteger el interior del habitáculo colocando un parasol o aparcando en un zona que tenga sombra.