Un bollo en la carrocería de tu coche puede ser más peligroso de lo que has pensado hasta ahora. No hablamos de estética, hablamos de seguridad vial. Se trata de un problema que debes solucionar en el taller oficial de tu concesionario en cuanto se produce porque, tarde o temprano, el coche acabará allí a la fuerza. Así que deja de pasar por alto estos problemas en tu coche. El número de vehículos que no pasa a la primera, o en sucesivas visitas, la ITV, por defectos en la carrocería sigue subiendo año tras año.
En 2017 más de 20 millones de vehículos se tuvieron que someter a la inspección ( en concreto, 20.204.766, incluidos turismos, motocicletas, vehículos industriales, agrícolas y autobuses), y de ellos 3,83 millones presentaron defectos en la carrocería, 608.407 fueron de carácter grave.
En términos porcentuales, estas cifras suponen un incremento del 12,4% en los defectos de carrocería leves frente a los datos de 2016 y una subida aún mayor, del 14,6% en el caso de los defectos graves, según ha constatado la red de talleres expertos en chapa y pintura CertifiedFirst tras analizar los datos facilitados por el Ministerio de Industria.
“La importancia de la carrocería va más allá de su faceta meramente estética, pues mantenerla en buen estado de conservación influye en aspectos tan importantes para el conductor como la seguridad, la aerodinámica o el consumo”, señala Jordi Ortega, responsable de CertifiedFirst.
El aumento de los defectos graves es aún más alarmante si echamos la vista atrás y comparamos los resultados de las ITV desde 2013 hasta el pasado ejercicio. Analizando la evolución de los últimos cinco años, comprobamos que el aumento de los defectos graves en el periodo se eleva hasta casi el 30% (un 28,1%) en el caso de los graves, y hasta un 45,2% en el caso de los leves.
