Los dispositivos de seguridad pasiva que se encuentran en el interior de nuestro vehículo tienen como función protegernos en caso de sufrir un accidente. Uno de los elementos de seguridad pasiva más eficaces son los airbags del coche, junto a los cinturones de seguridad. Desde AMS Conde te explicamos cómo funcionan y qué tipos de airbags están disponibles en el interior de tu vehículo. ¡Sigue leyendo!
Cómo funcionan los airbags de un coche
Los airbags son dispositivos de seguridad que tienen como objetivo que los usuarios no se choquen con los elementos que hay en el interior del coche. Su funcionamiento es muy sencillo y consiste en que se activan los diferentes airbags cuando un sensor detecta que se va a producir una colisión. De esta manera, el posible impacto que pueda sufrir el conductor y sus acompañantes se amortigua.
Cabe destacar que los componentes con los que se crean los airbags también han evolucionado con el paso de los años. Hoy en día, no suponen casi un riesgo para la integridad física de las personas.
Tipos de airbags en un coche
En la actualidad, algunos vehículos cuentan con siete tipos de airbags: frontales, laterales, traseros, con cortina hinchable, para pies y piernas e, incluso, un airbag para peatón en el parachoques y parabrisas. A continuación, te explicamos qué función tiene cada uno de ellos y su importancia en términos de protección.
Airbag frontal
El airbag frontal es el más común y se sitúa en el centro del volante y en el salpicadero para proteger al conductor y a su acompañante. Se estima que los airbags frontales reducen hasta un 30% el riesgo de muerte de un conductor en un accidente de colisión frontal. Además, se suelen activar cuando el choque se produce a una velocidad superior a los 30 kilómetros por hora.
Es importante recordar que si viajamos con nuestro hijo pequeño y colocamos un sistema de retención infantil en el asiento delantero, tenemos que desactivar el airbag frontal para evitar que, ante una posible colisión, impacte contra el pequeño.
Airbag lateral
El airbag lateral se sitúa en la zona lateral del asiento o en los paneles de las puertas. Su función principal es proteger el tórax y la cadera de los usuarios del vehículo. Su activación se produce cuando la velocidad del impacto es superior a los 18 kilómetros por hora.
Airbag de cortina
El airbag de cortina recibe este nombre debido a que se descuelgan del techo, aparentando ser una cortina. La función de este elemento es proteger la cabeza y el cuello de las personas que estén en el interior del vehículo y que se encuentra tanto en las plazas como traseras.
Airbag trasero
El airbag trasero tiene como finalidad proteger a las personas de posibles golpes en la nuca, por este motivo, se colocan detrás de los reposacabezas de los asientos posteriores. Su activación se produce si recibimos un fuerte golpe por detrás.
Airbag de cinturón de seguridad
El airbag de cinturón de seguridad ha sido creado para reducir la presión que causa el cinturón de seguridad sobre el pecho de los usuarios en caso de sufrir un accidente. Generalmente, este tipo de airbag se coloca en los asientos traseros.
Airbag de rodilla
El airbag de rodilla se ha diseño para reducir los golpes de rodilla contra el salpicadero que se producen cuando sucede una fuerte colisión.
Airbag de peatón
El airbag de peatón se creó para reducir el impacto del peatón contra la luneta del vehículo. Este dispositivo consiste en un proceso en el que la parte trasera del capó se levanta unos 10 centímetros, al mismo tiempo que el airbag se despliegua sobre la luneta delantera para proteger, sobre todo, la cabeza de la persona atropellada.
Precauciones con los airbags de un coche
Para que los diferentes tipos de airbag que incorpora nuestro vehículo realicen sus funciones correctamente y garanticen la máxima seguridad es importante que evitemos algunas conductas durante la conducción. En primer lugar, no debemos colocar las manos, los pies o los brazos encima del airbag. La razón principal se debe a que su activación se produce en milésimas de segundo y no nos da tiempo a apartarnos, lo que puede provocar graves lesiones en nuestro cuerpo.
Una de las precauciones con los airbags que se recomienda es la de mantener una distancia mínima de 25 centímetros entre el pecho del conductor y el volante. En el caso del acompañante, serán la misma distancia entre su pecho y la guantera.
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